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• Vocación con preparación…
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A+ A- • Vocación con preparación…
Por: Raymundo León.
No decir algo de los profesores que año con año reprueban un examen es consentir que tanto niños como jóvenes sigan en manos de docentes que no saben ni para qué sirve un pizarrón. Es consentir que muchas generaciones sigan egresando mal preparadas de las escuelas de educación básica, media superior y superior. Peor aún, es permitir que muchos integrantes de esas generaciones pretendan ser maestros "con vocación", mal preparados y dispuestos a seguir preparando mal a otros niños y jóvenes.
Un profesor, aunque tenga vocación, estará siempre reprobado cuando no logre siquiera obtener un 60 por ciento de los reactivos de un examen. Su responsabilidad es estar bien preparado para lograr buenos alumnos si es que se siente con esa vocación especial.
Cierto es que, como asegura un agudo observador que no da sus referencias personales, ingresan al servicio docente de todo el país muchos recomendados que misteriosamente aprueban un examen de selección cuando ni siquiera saben escribir correctamente su nombre, por ejemplo.
Cierto es también que muchos de los que presentan examen para ingresar al servicio docente tienen una formación académica nula con respecto de lo que es la docencia. Un alto porcentaje de ellos se han presentado al examen con la aspiración legítima de obtener un ingreso extra para el sostenimiento de sus familias y no para realizarse profesionalmente. Por esa razón, muchos se convierten en maestros frustrados, borrachos o violadores.
También es verdad que en toda esta mecánica, se encuentra la incapacidad de los gobiernos federal y estatal para generar fuentes de empleo para esos profesionales que buscan cobijarse en la docencia y obtener así mayores ingresos en el magisterio, haciendo a un lado a normalistas de muchos diez en la boleta.
Hay normalistas que se dicen con vocación, pero que no saben hilar una oración. En una ocasión, jóvenes normalistas que protestaban en Xalapa frente a Palacio de Gobierno por no haber obtenido una plaza dejaron ver en sus boletines, en la forma de escribirlos, muchas dudas con respecto a su preparación profesional. También hay que recordar que muchos normalistas esperan ingresar al magisterio porque no tienen de otra, porque sus padres son profesores y es la mejor forma de garantizarles un trabajo.
En Veracruz y en todo el país, por fortuna, hay excelentes profesores aún que no andan pensando en puentes sino en cómo lograr que sus alumnos avancen y egresen bien preparados de su curso.
La vocación se complementa con la preparación y eso es responsabilidad de cada individuo, de cada uno de los que deseen ser profesores. En la historia hay cientos de historias de maestros que sintiendo el llamado de la docencia se prepararon adecuadamente bajo la guía de otro maestro o por sí solos. Esos docentes nunca anduvieron buscando una excusa para justificar su falta de preparación o una ocasión para exaltar su vocación docente. Demostraron sus conocimientos, su capacidad y su vocación para preparar bien a sus alumnos cuando la sociedad se los exigió.
desdelaesquina@hotmail.com
02/08/10
Nota 82154