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*** Protección Civil, un fiasco.
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Andrés Valencia Heredia*** Noche mexicana sin cohetes.
QUIEN quiera que sea el candidato priísta a la gubernatura del estado en el 2004, al menos cualquiera de los hasta ahora visibles, deberá enfrentar el enorme riesgo de ser derrotado en las urnas por el propio PRI. Difiero de quienes presagian divisionismo al interior del tricolor; el PRI ya está fracturado. Es evidente la división que existe y el golpeteo entre Yunes, Carvajal, Ruiz, Herrera y los grupos que los respaldan en sus respectivas precandidaturas.
Juan Maldonado Pereda , secretario de Educación y Cultura y
Eduardo Andrade Sánchez , dirigente estatal de la CNOP, se apuntan como candidatos de unidad, pero en estos momentos pensar en un hombre -o mujer- que logre la unidad priísta es utópico, pues siempre habrá un Fidel Herrera, un
Miguel Ángel Yunes o un Gustavo Carvajal que, resentidos, son capaces de sumarse a la oposición y trabajar en contra de quien resulte el elegido. Hasta ahora todos dicen tener méritos, ser los mejores y garantizar el triunfo en las elecciones del año próximo, pero ninguno ha tenido la sensibilidad, humildad y sencillez de decir que está dispuesto a respetar la decisión de las bases y a declinar a favor de cualquier otros de sus compañeros precandidatos del PRI. Extraoficialmente se ha escuchado que
Tomás Ruiz González y
Miguel Ángel Yunes Linares estarían dispuestos a ceder su espacio y a trabajar a favor de
Alejandro Montano Guzmán , si éste decidiera participar en la carrera por la sucesión, pero mientras ninguno de ellos lo confirme públicamente, sigue siendo un mero rumor. Así, el abanderado priísta contenderá en las urnas contra el PAN, el PRD, Convergencia, el PT o contra el candidato de la alianza que surja de dos o más de los partidos de oposición, pero parece que el verdadero enemigo está dentro del propio PRI, el voto de castigo de los priístas resentidos está al asecho.
LAS INTENSAS lluvias que cayeron sobre la entidad durante las últimas 48 horas provocaron severos daños en diversos municipios, Xalapa, Veracruz, Córdoba y Orizaba, entre ellos. Ante el deslave de cerros y el bloqueo de carreteras, el desbordamientos de ríos e inundaciones de colonias y comunidades, los cuerpos de auxilio y particularmente los Comités de Protección Civil han demostrado ineficiencia y descoordinación. Por ejemplo, ante el desgajamiento de los cerros, varias carreteras estatales y federales han quedado bloqueadas, pero la
Policía Federal Preventiva , Tránsito del Estado y Seguridad Pública no han sido capaces de instalar retenes o módulos de información para los automovilistas con el propósito de informarles cuáles son las vías alternas que pueden utilizar, tampoco han recurrido a la radio o a la televisión para orientar a la gente, retirar la piedra y lodo del camino e instalar albergues no basta, la información es vital y puede salvar muchas vidas. Muchas molestia existe entre automovilistas que viajan por alguna de las carreteras obstruidas y justo al llegar al punto neurálgico se les informa que no hay paso y que deben regresar por donde vinieron para tomar una vía alterna, siendo que en algún entronque cualquiera de las corporaciones antes mencionadas pudo haberles informado que no se arriesgaran a transitar por esa vía, pues además de ocasionar embotellamientos innecesarios en las carreteras, se exponen a sufrir algún accidente por los deslaves. ¡Coño loco!, qué pasa con Sardiñas, ¿para qué tantas reuniones?, ¿para qué tantos comités en el estado?, ¿de qué sirve la capacitación?, si a la hora de la emergencia se les hace bolas el engrudo. No soslayen el trabajo de los medios de comunicación en las tareas de protección civil.
A propósito de protección civil, ojalá que las autoridades municipales, estatales y de seguridad pública ya estén tomando las medidas necesarias para impedir la venta de cohetes, cohetones y demás artefactos explosivos que tradicionalmente se venden en los mercados y en la vía pública previo al 15 de septiembre. Ojo, nos comentan que ya hay mercadeo de artefactos explosivos y la policía no actúa. Vale la pena no echar el asunto en saco roto y redoblar la vigilancia, para evitar otra tragedia como la que ocurrió en la ciudad de Veracruz el pasado 31 de diciembre. Envíeme sus comentarios y sugerencias a laberintopolítico@yahoo.com.mx
07/09/03
Nota 12975