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| • Temen saqueos dirigidos a presionar a las autoridades.
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A+ A- Alejandro Villarreal.
Orizaba, Ver. - La tensa calma que prevalece en la ciudad de Orizaba ha puesto a trabajar "el doble" a la policía municipal, Protección Civil, así como a empleados de confianza de esta administración municipal ante el temible rumor de posibles saqueos a establecimientos, sobre todo a grandes tiendas.
Todo esto ha sido el resultado de la pésima estrategia de las instancias municipales que encabeza
Igor Rojí López , quien no ha respondido contra los grandes establecimientos que permanecen abiertos, mientras que el comercio de nivel medio y bajo, incluso el informal, padece la peor crisis económica y sus integrantes no hallan la forma de llevar comida a sus familias puesto que ni el subempleo está a la mano.
El despliegue de vigilancia en distintos puntos de la ciudad se ha redoblado, los uniformados ven "moros con tranchetes" cuando observan a jóvenes de las colonias caminando por céntricas calles; protección Civil, ha establecido comunicación directa con empresarios del nivel medio y alto con el fin de realizar "supervisiones" constantes que no alerten a los ciudadanos, mientras que los gerentes han recibido instrucciones de redoblar su seguridad privada en las entradas y salidas de los centros comerciales.
Algunos representantes de diversos sectores, principalmente el comercial, han calificado esto como una "bomba de tiempo" toda vez que los que viven de sus negocios comerciales siguen insistiendo en abrir, como es el caso de los dueños de bares y cantinas, que es considerado uno de los gremios más desprotegidos.
"Son decenas de familias pobres que dependen del salario de un mesero, de una persona que labora en la limpieza de un establecimiento de este giro, de un encargado entre otras áreas que no están laborando y se convierten en un peligro latente, no por trabajar en este giro, sino por sus condiciones económicas que los están llevando a la desesperación".
05/06/20
Nota 132849
