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| Shaquille O´Neal y Kobe Bryant protagonizan una lucha de poder en los Lakers al comenzar la
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A+ A- El nuevo enfrentamiento verbal que ha surgido entre el pívot Shaquille O´Neal y su compañero Kobe Bryant no es más que la continuidad de un problema que nunca solucionaron Los Angeles Lakers y su entrenador Phil Jackson.
Lo que O´Neal y Bryant quieren definir de una vez por todas es la figura del jugador, líder indiscutible del equipo, y al que todos tienen que respetar y verlo como referencia dentro del campo.
En definitiva no se trata más que establecer una jerarquía de poder en la que O´Neal quiere ser el líder indiscutible y lo mismo sucede con Bryant.
El argumento de ambos es que son "indispensables" para los triunfos del equipo, pero cada uno se consideraba más necesario que el otro y viceversa.
Cuando las dos veces anteriores las súper estrellas demostraron fuera y dentro del campo que tenían filosofías y objetivos enfrentados en cuanto a la manera de entender el liderazgo, los Lakers no supieron como darle solución y se limitaron a utilizar la diplomacia de seguir jugando y ganando partidos con tres títulos de liga consecutivos.
La victorias ayudaron a que tanto O´Neal como Bryant dejasen de un lado las reivindicaciones personales dentro del equipo y aceptasen la realidad de que ambos se necesitaban si querían seguir siendo campeones.
Pero los hechos han cambiado dramáticamente de cara a la nueva temporada que va a empezar y con la llegada de Karl Malone y Gary Payton, O´Neal siente que ya no depende tanto de Bryant, envuelto además en problemas legales por el juicio que se le va a seguir por supuesta violación, y quiere de una vez por todas definir que el único líder que hay en el equipo es él.
"Este es mi equipo", le contestó O´Neal a Bryant cuando el escolta estrella declaró que nadie le tenía que decir como debe jugar cuando está en el campo, aunque se encuentre lesionado.
Bryant recordó que lo ha hecho con todo tipo de lesiones y sin importarle las consecuencias, mientras que O´Neal ha exagerado la que tuvo en el pie y tobillo, además de no haber llegado nunca al campo de entrenamiento en la mejor forma física.
El escolta estrella de los Lakers, en declaraciones a la cadena de televisión ESPN, dijo que si los Lakers eran su equipo, entonces O´Neal debía demostrarlo en el campo, no acusar a los compañeros de las derrotas, reivindicar sólo los triunfos, y darlo todo en cada partido.
Más directo y agresivo fue Bryant cuando cuestionó a O´Neal hablar de liderazgo y de pensar en el equipo mientras quería ya una extensión del contrato que ahora le permite ganar 30 millones de dólares por temporada.
"Han llegado jugadores como Malony y Payton que rechazaron millones de dólares por estar con los Lakers y la mayor preocupación de O´Neal en la pretemporada ha sido el que le renueven el contrato multimillonario que tiene firmado", crítico Bryant.
El escolta estrella advirtió que tendrá que ser la propia organización de los Lakers las que tome control de las acciones de falta de profesionalismo de O´Neal si no quieren que el equipo sufra las consecuencias como la pasada temporada y se quede fuera de la lucha por el título de campeones.
O´Neal reiteró que si Bryant no está contento con el equipo, entonces como "no es el suyo" puede la próxima temporada acogerse a la opción de convertirse en agente libre e irse.
"Cada uno sabe dentro de la liga que Kobe es importante para los Lakers, pero el barco se mueve con un motor diesel y por lo tanto al campo hay que salir para jugar en plenitud y si no estás en forma debes pensar en el resto de los compañeros", señaló O´Neal. "Tiene que entender que el balón se pasa al jugador que mejor ubicado esté para anotar canasta".
Bryant, que es duda para el partido de esta noche contra los Mavericks de Dallas, ya dejó muy claro que para nada pensaba cambiar su estilo de juego y menos por lo que le pudiese decir O´Neal.
Jackson ha guardado silencio en la nueva batalla por el control del poder dentro de los Lakers y se ha limitado a decir que espera que el equipo comience la temporada haciendo su mejor baloncesto, algo que puede ser muy difícil si antes no define de una vez por todas el papel que deben tener cada una de sus dos súper estrellas.
El enfrentamiento entre O´Neal y Bryant tampoco ha llegado en el mejor momento para el baloncesto de la NBA, que tiene ante si una de las temporadas más decisivas de cara a la recuperación de audiencia de televisión y asistencia a los campos.
Los problemas legales de los jugadores, los millones de dólares que ganan, el incremento en las entradas y el poco espectáculo que ofrecen los profesionales, son entre otros los elementos que han alejado a los aficionados de los campos y las pantallas de televisión.
28/10/03
Nota 14691
