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El ambulantaje es un problema cada ves mas difícil de controlar en Orizaba.
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A+ A- Orizaba, Ver.- Mal y de malas el SNTE, pues al no tener su registro ante la STPS y luego la Suprema Corte de Justicia de la Nación declaró improcedente la demanda de amparo que solicitó para obligar a la STPS a que le diera el registro, en la última negociación salarial una vez más estuvo imposibilitado para emplazar a huelga a la Secretaría de Educación Pública, expresó
Raúl González Ignacio , coordinador estatal del Movimiento "Nuevo Sindicalismo" de la Sección 32 del SNTE.
Apuntó el dirigente sindical que el SNTE está atrapado en una encrucijada a partir de la descentralización educativa que se inició en mayo de 1992, el SNTE quedó conformada por trabajadores adscritos a la SEP, que conservan su status jurídico de trabajadores al servicio del Estado, pero también con más de un millón de trabajadores de instituciones educativas en las entidades federativas quienes, de acuerdo a un dictamen de 1995, dejaron de serlo.
Estimó el dirigente que al declarar improcedente la demanda de amparo solicitada por el SNTE, cortó de tajo toda posibilidad de que esta organización gremial consolidara mayor poderío político de tal manera que en la última negociación del mes pasado, el sindicato no tuvo posibilidad de emplazar a huelga al gobierno federal por la firma de un Contrato Colectivo.
Explicó Raúl González que al no ser titular de ningún Contrato Colectivo, el SNTE sólo es "invitado" por la autoridad laboral para firmar condiciones generales de trabajo. Por ello lamentó que ante esta circunstancia se corre el riesgo de que los trabajadores de la educación en el interior del país, conformen sus propios sindicatos con todas las difíciles implicaciones que esto conlleva, para negociar directamente con los gobiernos estatales sus contratos colectivos bajo los beneficios de la Ley Federal del Trabajo.
Destacó que el problema grave y de fondo es que el SNTE perdió credibilidad social y no tan solo está en riesgo su estructura nacional, sino su existencia misma como sindicato, colocándolo al borde del precipicio.
Por lo anterior, "Nuevo Sindicalismo", dijo que el SNTE no debe reaccionar con ceños fruncidos, sino que la disyuntiva consiste en asumir pluralmente y con responsabilidad el reto de su transformación democrática profunda y sin cortapisas, para convertirse en un sindicato capaz de diseñar políticas públicas, comprometiéndose seriamente con su materia de trabajo…o quedar reducido a escombros".
02/06/02
Nota 1582