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Cuadro Xeneize amarra un nuevo título en el torneo local.
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A+ A- Los hinchas de Boca Juniors desataron un auténtico carnaval azul y amarillo luego de coronarse campeón del Torneo Apertura del futbol argentino gracias al triunfo 2-1 como visitante ante Arsenal, en un encuentro correspondiente a la 16ta fecha.
Los goles del campeonato llegaron a través del delantero Roberto Colautti, a los 24 minutos, y del mediocampista Matías Donnet, a los 64. Arsenal, que hizo de local en el estadio de Racing, descontó a los 78 con un penal de Christian Gómez.
Este es el vigésimo título local de su historia. El último había sido en el Apertura 2000, también bajo la conducción de Carlos Bianchi. El conjunto boquense, que en julio también se coronó campeón de la
Copa Libertadores América , jugará el 14 de diciembre ante el Milán de Italia la final de la Copa Intercontinental.
Sus enloquecidos hinchas transformaron la cancha de Racing en un festival azul y amarillo, cantando hasta quedar afónicos "y ya lo ve, y ya lo ve, somos campeones otra vez".
Con el capitán Diego Cagna a la cabeza, los jugadores se colgaron del travesaño de uno de los arcos que daba a la parcialidad xeneize, mientras revoleaban sus camisetas. Entre ellos, como uno más, saltaba Carlos Tevez, la figura del equipo que no pudo jugar en la última recta del torneo por una lesión en la rodilla.
Después llegó la esperada vuelta olímpica y la corrida de los jugadores agarrados de la mano junto a Bianchi para tirarse de palomita al césped. Allí estaban sonrientes los colombianos Luis Perea y Fabián Vargas y el brasileño Iarley, que debutaron con un título en su primera temporada con la casaca de Boca.
Más tarde, la fiesta se trasladó al Obelisco, habitual punto de festejos de esta ciudad, donde los simpatizantes, con gorros y banderas, dieron su propia vuelta, sin olvidarse del clásico rival : "Es para vos River Plate, te lo dedica papá, Boca es el campeón, la vuelta va a dar".
Los boquenses, que en julio también eligieron ese lugar para celebrar la Copa Libertadores, no se dan por satisfechos y al grito de "el que no salta no va a Japón", esperan que su equipo les de otra satisfacción este año en la final que allí se jugará ante el Milan por la Intercontinental.
Pero antes, Boca debió lidiar con un rival que le cerró los espacios, bien parado en defensa, agazapado para la réplica, y que en los últimos minutos pudo aguarle la fiesta.
El primero llegó con una asistencia precisa del mediocampista Matías Donnet al área para el ingreso de Colautti, que definió de derecha por encima del arquero.
Boca, haciendo gala de la suerte que se le suele atribuir a los equipos campeones, amplió el marcador cuando Donnet sacó un derechazo desde fuera del área, que el arquero Oscar Limia intentó retener pero el balón se le escapó de las manos.
"Yo creo que el campeonato Boca lo jugó en un muy buen nivel. Los jugadores forman un equipo con mucho equilibrio y tratan de jugar al futbol como se debe", dijo tras el partido Bianchi, el más ganador de la historia del club con ocho títulos -cuatro internacionales y cuatro locales-.
Boca, que lideró el Apertura desde la primera fecha, se consagró campeón como el equipo más goleador (29) y con la valla menos vencida (8). Sumó 11 victorias, 5 empates y sólo una derrota.
27/11/03
Nota 15901