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| fue rapado y los videos se grababan en el mismo lugar donde estaba retenido; desarrollo más
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A+ A- Revela más datos de su plagio.
Por;
Juan Santos Carrera .
Orizaba, Ver. -El diputado federal del PRI por el XVIII Distrito con cabecera en Zongolica,
Mario Alberto Rafael Zepahua Valencia, pode punto final a la polémica con el Procurador General de
Justicia Pericles Baltasar Namorado Urrutia y solo pide, que se investigue a fondo su secuestro para poner tras las rejas a sus plagiarios.
Dijo, que en Veracruz todos debemos confiar en la procuración de justicia y que aunque hay errores, pone su confianza en la PGJE y en su titular Pericles Namorado a quien considera su amigo a pesar de que el propio Pericles dijo que nunca han sido, no son, ni quiere que sean amigos.
Reiteró, que tanto él como su familia están amenazados por los secuestradores; pero como cualquier persona que padece de la delincuencia organizada, espera que se ponga tras las rejas a los delincuentes.
Apuntó que está en la mejor disposición de cooperar con las autoridades y aunque no ha recibido otra invitación de la PGJE con gusto asistirá cuantas veces sea necesario declarar y responder únicamente a las preguntas que le formulen.
Entrevistado por éste medio de comunicación,
Mario Alberto Rafael Zepahua Valencia reveló nuevos datos de su secuestro el pasado 11 de junio del 2003 a las 15:45 horas;
Uno, la barba, mostrada en los videos enviados a los medios de comunicación, el primero el se muestra recortada porque el día 6 de septiembre fue rapado a coco con todo y barba, tal como aparece en el video del 21 de septiembre. Posteriormente se la dejaron larga hasta casi tocar el pecho; "Bueno, a mi no me sale mucho pelo en la cabeza, la barba, pues cuantos días tenía; yo lo que puedo decirles es que llegué a percibir una barba larga, hasta el pecho... así, larga. El pelo bueno, el pelo me crece menos que la barba, soy pelón".
Dos, los videos fueron filados en un sitio donde solo veía la cámara de video con una luz brillante y escuchó las palabras de sus plagiarios que le impedían voltear a otro sitio.
Solo alcanzó a ver un pequeño espacio cuadrado con una cámara de video al frente. Todo se grabó en el mismo lugar donde los mantenían encerrado con los ojos vendados y poco uso de sus anteojos.
Por cuestiones propias de su cautiverio, aprendió a desarrollar más los sentidos del ser humano, en especial el olfato y el oído; por eso sabe que jamás salió de la Sierra de Zongolica, el trinar de los pájaros, el sonido de las hojas de los árboles, el viento característicos de ésta zona rural y el piso donde caminaban los secuestradores, le dijo que no estaba lejos de sus tierra.
12/02/04
Nota 18620
