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La selección de Grecia celebró el campeonato de la Euro con su gente.
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A+ A- Cerca de 300 mil personas, repartidas entre el interior y los aledaños del estadio del Panathinaikos y las calles de la ciudad, recibieron en Atenas al equipo nacional de futbol que ayer ganó la Eurocopa de Portugal 2004.
El autobús blanco que transportaba a los jugadores y al equipo técnico encabezado por el entrenador alemán Otto Rehagel, con el trofeo en la mano, tardó tres horas y media en atravesar un recorrido que no suele exceder los 45 minutos. Desde el aeropuerto internacional de Atenas al estadio histórico Panathinaikos, con fondo la Acrópolis de Atenas.
Un señor de avanzada edad, que guarda recuerdos de antes de la II Guerra Mundial y ha visto al pueblo griego salir a las calles en diversas ocasiones de importancia nacional, comentó a la televisión griega que "nunca he visto ni he vivido tanto entusiasmo".
El autobús hizo el tramo desde el aeropuerto con una escolta de motocicletas de la policía que simplemente cuidaban de que no fueran atropellada la gente, ya que se volcaban con entusiasmo para felicitar y tocar el vehículo que llevaba a los "héroes",a los "once dioses griegos" contemporáneos.
La gente se acercó a las calles blandiendo banderas griegas, con juegos artificiales, cornetas, sombreros blancos y azules, con banderas sobre sus cuerpos.
Los jugadores miraban desde el interior del autobús muy sorprendidos al ver la multitud en el estadio que le esperaba.
Los altos oficiales, entre ellos, el primer ministro griego, Costas Caramanlis, esperaban impacientes durante dos horas, y el público durante cuatro, para que llegara el autobús al estadio Panathinaikos, en el que se celebraron en 1896 los primeros Juegos Olímpicos de la Edad Moderna.
La gente los recibió con "olés" cada nombre de los miembros del equipo que pronunciaba el locutor por la megafonía.
05/07/04
Nota 24218