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Casi lleno el SOCUM.
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A+ A- Se termino el ayuno que varios años padeciera el fútbol orizabeño, y de que manera los aficionados volvieron a ser testigos del retorno del futbol de 1ª "A" en Orizaba, con la presentación de los nuevos Albinegros del Orizaba de
Antonio Carlos Santos ante el Atlante de Miguel "piojo" Herrera, ante una importante asistencia en las tribunas, aunque el lleno no se consumo si el ambiente de alegría por volver a contar en Orizaba con un verdadero equipo de futbol y en una división que es la antesala de la
Primera División Nacional .
Orizaba jugó a ritmo de batucada, una batucada que logro ambiente de una manera extraordinaria el encuentro, pues pareciera que los jugadores tocaban la pelota a un ritmo de samba, a un ritmo de sabor brasileño, y es que Robson Marcio estaba tocando la pelota con bastante peligrosidad en la zaga atlantista y en verdad ya era todo un dolor de cabeza para Maturin y Galarci, quienes estaban a cargo de frenar las arremetidas, ello provocó en las tribunas una especie de contubernio, jugador-fición, pues siempre encontró el respaldo del publico en cada uno de los embates en terreno enemigo, hasta conseguir el primer gol, aunque no era el primero del encuentro si del Orizaba, que emparejaba los cartones, antes
Juan Angel Paredes , ecuatoriano, adelantaba al Atlante con un gol que de rebote logra vencer al portero
Miguel Alejandro Palacios , con el gol de Robson la explosión de fanáticos sirvió para medir la intensidad de gargantas que en el Socum se dieron cita, el primer gol del Orizaba, el primero después de cuantos años conteniendo ese grito que verdaderamente pareció como una canción.
Martín Cabrera,
José Fernando Garcia y
José Manuel García en la tribuna de honor gozando el funcionamiento del encuentro, donde se podía respirar futbol por todos los rincones del estado.
Al final todos salieron satisfechos, los jugadores orizabeños, Carlos Santos, los directivos, la comuna de Orizaba que preside Cabrera Zavaleta y en particular la fanaticada chayotera que salió contenta, pese al gran aguacero que baño los últimos minutos del encuentro y que parecio que el Dios Tlaloc con esa demostración natural bendijo al equipo y al estadio Socum.
22/07/02
Nota 2458