|
Alex dio el golpe final para eliminar a Uruguay de la Copa América.
|
A+ A- La selección de Brasil vence en penales 5-3 a Uruguay, luego de terminar empatados 1-1 en tiempo regular, en la segunda semifinal de la
Copa América Perú 2004, celebrada en el Estadio Nacional, de Lima.
Marcelo Sosa, al minuto 22, abri ó el marcador con un gol alucinante para el arquero brasileño. Adriano inició bien el segundo tiempo, y al 46’ colocó los cartones con el 1-1.
En los penales, sólo el charrúa Vicente Sánchez erró sus disparo al mandarlo a la izquierda de Julio César, que logró alcanzar y tapar el trayecto del esférico.
Los primeros minutos del encuentro iniciaron con dosis de adrenalina, Uruguay fue quien tocó primero la puerta, y posteriormente Brasil lo intentó por la banda izquierda, con Adriano. Pero la jugada grande, la de mayor claridad y la que cualquier delantero desearía tener, fue errada por los charrúas. Un largo servicio hacia el extremo derecho para Carlos Diogo, que le ganó la salida al arquero brasileño Julio César con un cabezazo, y en el área chica, sólo, sin marca y sin arquero, Darío Silva falló su disparo. Error más grave no se podía ver.
El gol llegó al fin con un remate de cabeza, demasiado astuto, de Marcelo Sosa, que picó la pelota para sorprender al arquero brasileño Julio César. Los embates de Uruguay nunca cayeron, pero Brasil también lo intentó, primero por la banda izquierda, luego optó por arribar por el centro, pero la zaga de Fossati les impidió el paso. En tanto, el uruguayo Darío Silva, en una jugada desde media cancha, quiso sorprender con un disparo de larga distancia, olvidándose que desde el área chica no logró anotar.
Hasta el último minuto se disputó ‘la de gajos’, y Brasil estuvo muy cerca de empatar el marcador por medio de Edu, pero un estupendo lance del arquero charrúa Sebastián Viera, evitó que el electrónico se igualara, después de desviar a una mano.
Sin embargo, Adriano consolidó su calidad de artillero con la Selección verdeamarelha y en menos de dos minutos en la segunda parte empató el encuentro, y a Uruguay se le comenzaron a dificultar más las cosas. La presión brasileña continuó, a los charrúas se le cerraron los espacios y se vio más complicado su arribo al terreno de los pupilos de Parreira.
La intensidad del partido nunca decayó, y Brasil se vio más ofensivo, pero sin descartar la buena labor de los uruguayos, que con base en contragolpes buscaron vulnerar el arco bien defendido por Julio César.
Pero no se vale restar méritos al cancerbero de los charrúas, Sebastián Viera, que sobre el último minuto del encuentro, en una jugada de Brasil por el costado derecho, y que en segundos cambió hacia el otro lado, Baptista remató para colocar la pelota junto al poste izquierdo de Viera, pero éste logró llegar desde el otro extremo de su marco, y con las piernas evitó que su Selección cayera después de haber realizado una excelente labor sobre el ‘campo de batalla’.
Los penales fueron inevitables, y quizá, fue la mejor forma para definir al segundo finalista del torneo continental, luego de que ambos representativos nacionales salieran a entregar todo sobre la rectangular color verde.
El ´volado´ favoreció a los brasileños, todos sus disparos fueron acertados. Mientras, Vicente Sánchez, de Uruguay, fue el único que falló su tiro, el cuarto.
El árbitro del encuentro fue
Marco Antonio Rodríguez , de México, que mostró una buena actuación, después de sus dos arbitrajes polémicos que había realizado en la actual
Copa América Perú 2004.
22/07/04
Nota 24937