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| Festejos de Costa Rica en Honduras.
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A+ A- Sufriendo todo el partido, Costa Rica sacó un apurado empate 0-0 ante Honduras y avanzó al hexagonal final de la CONCACAF, que clasificará a tres equipos para el Mundial de Alemania 2006. Los hondureños, por su parte, se despidieron de otra ocasión mundialista.
A Honduras sólo le valía la victoria para clasificarse, por lo que salieron en tromba para anotar un gol que les diera tranquilidad. Sin embargo, una y otra vez se encontraron con una infranqueable muralla.
Guatemala, que ya había alcanzado por adelantado su clasificación por el Grupo B, enfrentaba a Canadá.
Los visitantes se vieron metidos en su área y sólo respondieron de forma esporádica, aunque en sus contadas ocasiones llevaron peligro con sus puntas Paulo Wanchope y Andy Herrón.
Honduras fue mejor, tuvo más la pelota, pero no pudo armar una jugada clara dentro del área de los "ticos", que se pararon bien y se defendieron con todo.
Herrón tuvo la más clara a los 44 minutos, al quedarse solo contra el golero Víctor Coello, que le rechazó un zapatazo. Los 20.000 aficionados que acudieron al estadio "Francisco Morazán" quedaron mudos.
La segunda mitad del partido arrancó igual, Honduras metiendo el pie al acelerador y Costa Rica tirado atrás, luchando con todo para contener a un rival que los quería arrollar.
Amado Guevara y Danilo Turcios se movieron por toda la cancha tratando de romper las férreas líneas defensivas de los "ticos", pero todas sus jugadas se estrellaron en las murallas "rojas".
En entrenador de los "ticos", el colombiano
Jorge Luis Pinto buscó oxigenar a su equipo y mandó al campo a Walter Centeno por Alonso Solís, pero nada cambió, los "catrachos" manejaban el partido, pero sin poder llegar a las redes.
Cuando el dominio era abrumador para Honduras, surgió una controversia con el árbitro salvadoreño Rodolfo Sibrián que terminó expulsándolo, pero tomó todo su tiempo para salir del campo y el colombiano logró enfriar el partido.
Costa Rica comenzó a jugar con el tiempo, tratando de tener la pelota lejos de la portería de Mesén, mientras el estadio "Morazán" parecía un cementerio, con una afición que miraba como terminaban sus sueños de llegar a otro campeonato mundial.
18/11/04
Nota 29714
