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Hipólito Reyes Larios
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A+ A- El Obispo de la Diócesis de Orizaba,
Monseñor Hipólito Reyes Larios , reconoció y agradeció a las autoridades civiles salientes por la labor desempeñada en cuatro años de gestión pública, e hizo votos de esperanza por que quienes inician su labor habiendo contado con el voto popular- sean buenos servidores públicos teniendo como fin principal la consecución del bien común promoviendo un clima de moralidad pública, amando la verdad y la justicia, respetando la vida en todas sus formas, viviendo en honradez y promoviendo la armonía y unidad entre los ciudadanos.
Aunado a ello, el prelado católico al dirigir un mensaje a la población con motivo de la Navidad, dijo que este tiempo nos trae un nuevo comienzo, una luz de esperanza que quiere iluminarnos en medio de tantas dificultades que a veces nos agobian: la inseguridad social, la inestabilidad económica de nuestras familias, la falta de empleos, etc.
"Frente al año que inicia y ante la tentación de desaliento invito a todos a recibir y hacer nuestro el mensaje de los ángeles: "No teman, les traigo una buena noticia que causará gran alegría a todo el pueblo, hoy les nacerá, en la ciudad de David, un Salvador, que es el Mesías, el Señor" y haciendo a un lado el temor, dejándonos tocar por el Salvador, busquemos, por caminos de paz y justicia, el progreso de nuestras familias, de nuestra sociedad y de nuestra patria".
Mencionó también que al finalizar este año pueden decir con regocijo que Dios está y ha estado con nosotros, gracias a ello, la Diócesis ha vivido diversos acontecimientos que la conducen a agradecer a Dios su amor y bondad: la conclusión del plan pastoral diocesano que, sin duda, tanto bien hará a las comunidades que conforman nuestra iglesia particular.
La recepción de las Ordenes Sagradas de dos hermanos que se suman al trabajo pastoral. La celebración del
Congreso Eucarístico Diocesano , como respuesta a la convención internacional en la ciudad de Guadalajara. Así como la realización de la
Primera Visita Pastoral en los Decananos de Zongolica y Tequila, así como el inicio de la misma en Citlaltépetl, visitas que ayudan a que el Obispo esté más cerca de su pueblo, escuche su voz u lo conozca más para servirlo mejor.
"Ofrezco mis oraciones por la felicidad y bienestar de nuestro pueblo en este Año Nuevo 2005 que comienza, Rezo por los gobernantes, por quienes están solos o enfermos, por las familias separadas, por quienes sufren prisión, por quienes están enfermos de amor o reconciliación. Que la Paz que Jesús nos trae llegue a los corazones de todos y que la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre ustedes y permanezca para siempre ¡Feliz Navidad y Año Nuevo!"
24/12/04
Nota 31066