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Exigen que el alcalde no venda el agua del pueblo y pague aguinaldo a sus trabajadores.
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Juan Santos Carrera .
Aquila, Ver. - Trabajadores del ayuntamiento de Aquila, así como población en general, se apoderó de las instalaciones del palacio municipal, para exigir al alcalde,
Juan Merino Vázquez del
Partido Acción Nacional (PAN) cuentas claras, que no venda el agua del municipio, que no infle los precios de las obras públicas y que pague, a cinco trabajadores de la comuna en funciones, sus quincenas de cuatro meses de labor y aguinaldos.
Desde las 10 de la mañana de ayer, encabezados por el regidor único,
Aarón Suárez Ramírez , un grupo de más de 15 personas tomó el palacio municipal y llamó, a través de las campanas de la iglesia local, a la población para exigir cuentas claras al alcalde.
Al filo del medio día, superaban las 150 personas quienes se manifestaron colocando cartulinas al frente del palacio municipal donde se dijo, que
Juan Merino Vázquez , no ha cumplido a la gente con trabajo honrado y transparente como ofreció en campaña.
Acusan al edil, junto con el síndico,
Eduardo Alonso Alonso , de ser unas personas altivas, prepotentes, inhumanas, que ha sido trastornados por su adicción a las bebidas embriagantes, que ingieren en cantinas de Ciudad Mendoza y centros nocturnos de Orizaba, que le fallaron a su pueblo.
"Cobijados en el estandarte de la hipocresía, nos engañaron, no trabajaron y se burlaron de nuestro pueblo"
Aarón Suárez Ramírez admitió tener temor porque su vida corre peligro al haber sido amenazado por los ediles, incluso, ha perdido el sentido del oído ante una golpiza que policías municipales le propinaron por ordenes de Juan Merino.
Pero advirtió, que el pueblo se cansó ya de tantas torpezas en el gobierno, de que solo las familias del síndico y del alcalde se enriquezcan, que mientras el pueblo se muere de hambre, ellos disfrutan de las miles del poder.
Por eso, se irán hasta las últimas consecuencias para que les pague a el y a dos secretarias, dos intendentes y el como regidor único, sus quincenas y aguinaldos, que ascienden a más de 250 mil pesos.
Así mismo, el pueblo pide que el alcalde sea congruente en lo que dice y hace, porque hace cuatro años, cuando no era nada, organizó a la gente para no permitir que se llevaran el agua del pueblo y hoy, como autoridad, en un oscuro convenio, otorgó el vital líquido a varias comunidades donde recibió ostentosas cantidades económicas que seguramente, servirán para emborracharse en compañía de sus compinches, en bares, lupanares y centros nocturnos de la región, donde con alcohol, acalla los sonidos de las grabadoras y el tecleo de las computadoras.
29/12/04
Nota 31140