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La hipertensión Arterial ataca a la Juventud Veracruzana; IMSS.
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A+ A- Por; Gilberto Gómez.
Orizaba, Ver.- En promedio, dos de cada diez jóvenes de entre 20 y 29 años de edad son hipertensos, y los predispone al llegar a la edad adulta y a la senectud, a que su estado físico se encuentre muy deteriorado, y peor aún, a que por esta causa no vivan esta última etapa de la vida, por lo que es conveniente que limiten en la medida de lo posible, el consumo de sal, tabaquismo, alcoholismo, los productos ‘chatarra’, así como disminuir el nivel de estrés, el cual desafortunadamente es frecuente entre este grupo de población.
Así lo comentó la Dra.
Concepción Grajales Muñiz , Coordinadora de Salud Pública del Seguro Social, y enfatiza que en el país hay 15 millones de personas afectadas con la hipertensión, por lo que constituye un serio problema que debe atenderse y controlarse, y el factor más importante es que el enfermo reflexione que en sus manos está el postergar y limitar lo más que se pueda, el desarrollo de complicaciones propias de la enfermedad, principalmente el daño renal.
Menciona que en el primer trimestre del año, en Veracruz Sur los casos nuevos identificados sumaron mil 609, y aunque el grupo más afectado es el de 65 años y más, han detectado 14 enfermos de entre 15 y 24 años, cifra que si bien en apariencia no es significativa en relación al total, sí representa un alerta para redoblar las acciones de orientación y prevención entre los jóvenes, para evitar que el número aumente, aunque reconoce que una detección oportuna, en el nivel primario de la hipertensión, permite ofrecer un tratamiento más efectivo.
Grajales Muñiz recuerda que uno de los principales causas de la hipertensión, es el sobrepeso y también la obesidad, por ello, es importantísimo mantenerse en su peso ideal, ya que diversos estudios demuestran que el peso corporal no debe rebasar los centímetros de la estatura, es decir, si la persona mide 1.60 centímetros, los kilos ideales para ella son 60.
Finalmente, comenta que cuando la presión arterial aumenta, daña la pared de las arterias y éstas pueden llegar a obstruirse, lo que resulta muy grave cuando ocurre en el corazón, cerebro o los riñones.
10/05/05
Nota 34877