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*Medicamentos para bajar kilos dañan al corazón y a la tiroides.
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A+ A- *Las reducciones súbitas de peso descompensan el organismo.
Por: Edgar Gómez.
Graves daños al corazón y a la glándula tiroides causan las pastillas "mágicas" o "milagrosas" para bajar de peso "sin sacrificios", pues aceleran exageradamente el metabolismo para quemar la grasa corporal, además de que se vuelven a subir los kilos perdidos en cuanto se deja de tomarlas.
Tal advirtió la coordinadora de Programas de Nutrición y Dietética de la Coordinación de PREVENIMSS,
Martha Leticia Martínez Viveros , quien señaló que los remedios o las clínicas que prometen que las personas bajarán hasta diez kilos en una semana o diez días no son la mejor forma para controlar o reducir el peso, pues únicamente descompensarán su organismo y comprometerán la salud.
Lo mejor es, dijo, disminuir la cantidad de alimentos ricos en grasas de origen animal y en azúcar e incrementar el consumo de frutas, verduras y legumbres, así como tomar diariamente entre seis y ocho vasos de agua simple. Convertir esto en un hábito ayudará a evitar sobrepeso y obesidad y con ello disminuir el riesgo de sufrir enfermedades como diabetes mellitus, hipertensión arterial y elevación de colesterol y triglicéridos, entre otras.
Señaló que es muy importante hacer tres comidas al día, dejando un espacio entre una y otra de cinco a seis horas, no más, ya que los ayunos prolongados son otra de las causas que favorecen el sobrepeso y la obesidad.
Además de esta alimentación balanceada, es necesario hacer ejercicio físico, por lo menos cuatro veces a la semana. Mínimo 30 minutos al día de caminata.
En promedio, añadió, la pérdida de peso corporal debe ser de medio a un kilo por semana, de tal forma que en un mes pueda reducirse hasta cuatro kilogramos hasta alcanzar el peso adecuado, según talla, edad, actividad física y sexo.
La nutrióloga puso como ejemplo la siguiente dieta balanceada, para una persona adulta con actividad física moderada y sin hábitos dañinos como el tabaco y el alcohol:
Para el desayuno, un vaso de leche descremada; dos huevos con una yema (combinada con verduras: jitomate, nopal o ejote); media taza de frijoles caldosos, no refritos para reducir el aporte de grasa; una a dos tortillas o rebanadas de pan integral y una ración de fruta o verdura.
En la comida, una sopa, consomé de pollo o res desgrasado, o una ensalada de verduras; una ración de guisado: pollo, pescado o carne roja (de preferencia, sin grasa); una ración de frijoles caldosos, y dos tortillas como máximo.
En la cena, un vaso de leche descremada: una ración de ensalada de verduras o fruta, con queso panela o cottage; y una rebanada de pan integral o cinco galletas habaneras.
Subrayó que es muy importante evitar "comer entre comidas", y de hacerlo, que sea una fruta o verduras. Tampoco deben beberse refrescos gaseosos, y reducir el consumo de mayonesas, mermeladas, miel, y harinas.
11/02/06
Nota 41631