“BERRINCHE” de Aguilar Yunes...

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Por: César Augusto Vázquez Chagoya
"BERRINCHE" DE AGUILAR YUNES
El gobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán , sólo debe aplicar la ley en el caso del accidente de Alvarado donde murieron 7 personas el 1 de noviembre, antes de que el subprocurador de Justicia, Marco Antonio Aguilar Yunes , politice el caso: está empecinado en la versión de que el camión se cayó del puente porque al chofer le dio un "infarto fulminante".

El enojo del subprocurador es porque el comandante de la Policía Federal Preventiva , División Caminos, Marco Antonio Hernández Rosas , con sede en el puerto de Veracruz, dio a conocer que de acuerdo a sus peritajes, el camión se precipitó al río Papaloapan debido a una pinchadura de una llanta, y porque el chofer iba en exceso de velocidad, echando abajo la versión inicial por parte del Gobierno del Estado.

Aguilar Yunes, sin medir las consecuencias, llamó "irresponsable" al comandante de la Policía Federal Preventiva , porque dio a conocer el informe a la opinión pública antes que a ellos, que son la autoridad responsable del caso, y ordenó al Agente del Ministerio Público de Alvarado que citara a declarar al Comandante de la PFP, para que diga en qué basa sus dichos. Bueno, el hombre está "encaprichado", con enjundia, la misma que aplicó cuando fue Fiscal en contra de los servidores públicos en el Alemanismo y solapó todas.

Fíjese lector, que contrario a lo que manifestó con furia el subprocurador Aguilar Yunes, el gobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán , habló de la versión de la PFP y que había hablado con el comandante Hernandez Rosas, a quien le solicitó que le aportara la mayor documentación posible sobre el caso, porque él haría justicia.

Ya ven la diferencia de lenguaje y de modales, que contrasta con los del subprocurador.

En su atropellada conferencia de prensa, Aguilar Yunes habló de la "secrecía" que se debía guardar en la averiguación ministerial sobre el accidente y por eso reprochaba al comandante de la PFP citándolo a declarar con su Ministerio Público de Alvarado por andar revelando datos.

Para ser parejos, el licenciado Aguilar Yunes no sólo debe mandar a declarar a Hernández Rosas, sino también al gobernador de Veracruz y a la directora de Tránsito, Martha Montoya. Al primero, para que declare ¿cómo supo que el chofer había muerto de un infarto y lo anduvo diciendo a los medios de comunicación? A la segunda, ¿el por qué traía la autopsia del chofer repartiéndolo a los chicos de la prensa?

En esta columna se asegura que no declarará ninguno de los tres funcionarios. Aguilar, entre tantas cosas que dijo del comandante de la PFP, le señaló que no había estado en el lugar del accidente, como diciendo que por eso no podía hablar del caso. Se le olvida al subprocurador que Hernández Rosas sí es un verdadero comandante, y ellos mandan a sus peritos, que son gentes competentes, y no como el subprocurador que tiene que ir al lugar de los hechos, porque no creen en sus subalternos.

El caso es que en este accidente que tiene enlutado el pueblo de Alvarado, mientras se dan las autoridades versiones diferentes, a cada rato los paisanos de Roberto Blanco Moheno , mientan madres. Ellos quieren la verdad y justicia. No quieren ver un subprocurador empecinado con el infarto.

Fíjese: dice Aguilar Yunes que tiene un testigo de que fue un infarto. ¿Cómo? Primero la versión de que el chofer murió agarrando el volante, y ahora la versión de un testigo. ¿Qué vio éste? Si según Aguilar no se desprendió del volante el chofer, entonces el testigo le debe haber visto el rostro de dolor con todo y la alta velocidad que llevaba el autobús, o a lo mejor le gritó que le dio un infarto.

O falta que diga el subprocurador que hay un sobreviviente sorpresa del accidente, quien vio todo y cómo se infartó el chofer antes de caer al agua. Que este testigo tenía mirada de lechuza, la memoria de un elefante, y la capacidad adivinatoria de La Paca (aquella que supuestamente encontró el cadáver del diputado Muñoz Rocha, autor intelectual de José Francisco Ruiz Massieu , dirigente del PRI) para ver en unos cuantos segundos los síntomas del infarto, en un puente sumido en la oscuridad.

Mientras más mentiras se digan, más se enredan.

Pareciera que la misión de Aguilar Yunes es proteger al transportista que no aparece (ni el funcionario ha dicho una palabra de su paradero y menos que lo buscan). El interés del funcionario debe ser que cómo nació en Córdoba, ahí está la mera mata de los dueños de nuestras calles, vidas, caminos y carreteras: de allí es el líder de todos los transportistas del estado, Carlos Demuner Pitol . Protegiendo al transportista concesionario del autobús que se accidentó echándole la culpa al chofer, libra de responsabilidad a la directora de Tránsito, Martha Montoya, quien debió haber sacado la unidad accidentada de circulación: tenía rato andando por Alvarado, solamente con verlo, como lo dicen los de Alvarado.

Pero no se nos olvide que los de Alvarado son paisanos del gobernador, quien va a volver al lugar siendo funcionario y cuando no lo sea. Tiene muchos amigos a quienes les debe mucho y también ellos le deben a él.

No se murieron perros. Que no ande con sus "berrinches", porque es lo menos que necesita el mandatario. Se quiere justicia a secas.
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09/11/06 Nota 48515 

	Pasillos del Poder.
	Rescatan los cuerpos de cinco personas que perdieron la vida en accidente de Alvarado.