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• Más afectada la población femenina.
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A+ A- Marisol Páez.
Debido a que durante el invierno las noches son más largas y la oscuridad dura más tiempo se disminuye la producción de serotonina, sustancia que actúa como neurotransmisor en el cerebro influye en los estados de ánimo, lo cual aunado a la temporada decembrina, en que surgen nostalgias y recuerdos, causa que se produzca depresión o si ya esté presente, que se agudice.
Ésta se manifiesta con sentimientos de tristeza, desesperanza, pesimismo, apatía, aislamiento, fatiga, sentimiento de abandono, pérdidas de interés por actividades que antes eran placenteras (comida, sexualidad, socialización). Incluso se producen trastornos del sueño ( se duerme más y hay dificultad para levantarse) y muchas ansias por comer dulces y carbohidratos.
Así lo señaló la Psiquiatra del Hospital de Especialidades del IMSS Dra.
Acela Sandoval González y agrega que éste tipo de depresión estacional es más frecuente en la población joven, con picos de incidencia entre los 13 y los 16 años y de los 20 a los 35 años, quienes por la misma depresión tienen tendencia a estar siempre a la defensiva, malhumorados, rencorosos e irritables.
Dijo que la depresión en general afecta más al sexo femenino en proporción de ocho a uno; en ellas se detecta con mayor frecuencia porque son mucho más comunicativas, porque suelen ir más al médico y por los cambios hormonales que afectan su estado de ánimo.
Explicó que en estas fechas decembrinas, también se vinculados estos sentimientos de melancolía y tristeza con la pérdida de familiares o de un trabajo o negocio, divorcio, salud u otras situaciones que sucedieron durante el año que termina o, incluso en anteriores, pero que son duelos ‘no elaborados’, es decir no han sido superados.
Para disminuir o evita la depresión invernal, recomendó siempre mantener una estrecha comunicación verbal con la persona que se observe está deprimida y propiciar la compañía de amigos y familiares, a fin de evitar que se sienta sola y aislada, por lo cual hay que mantenerla ocupada con actividades que le produzcan placer y alegría.
Los jóvenes con depresión cambian bruscamente de conducta, se vuelven irritables, tristes e inician con quejas somáticas como dolor de cabeza, estómago, con flojera y sin ganas de salir a divertirse; en otros casos abusan del tabaco, del alcohol; entre los adultos se presentan conflictos frecuentes de pareja, discusión por cuestiones económicas, ausentismo y apatía laboral.
27/12/06
Nota 49690