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Lo ultiman a puñaladas afuera de cantina.
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A+ A- Por:
Luís Gutiérrez Jiménez .
Ixtaczoquitlán, Ver.- Por motivos hasta el momento desconocidos, un presunto despachador de una gasolinera de Córdoba, fue ultimado de al menos 30 puñaladas en las afueras del antro "El Congal", esto en la comunidad de Cuautlapan, la madrugada de ayer, tiñendo de rojo el territorio zoquiteco.
Tras el hallazgo del cuerpo, las autoridades municipales, judiciales y de Seguridad Pública, iniciaron las investigaciones, ya que se presume que la riña pudo haber iniciado en el interior de la cantina, pero esto no ha sido confirmado.
El hoy finado llevaba por nombre,
José Alonso Aguirre Galindo , de 29 años de edad, con domicilio en "Boulevard 27 de Septiembre" sin número, de Cuautlapan, municipio de Ixtaczoquitlán.
Los restos fueron identificados en su momento por su padre, Nicanor Aguirre, quien solicitó la entrega del cuerpo para darle cristiana sepultura y exigió una investigación correspondiente, para efectuar luego la captura de los asesinos de su hijo.
Sobre los hechos se conoció que el sábado por la noche y madrugada del domingo, cuando José Alonso arribó al antro de vicio "El Congal" que se localiza en Cuautlapan, a un costado de la gasolinera.
Ahí estuvo conviviendo con una mujer y según reportes extraoficiales, esto provocó una molestia con dos sujetos, con quienes inició un pleito verbal. Al parecer los rijosos abandonaron el lugar, mientras que el empleado continuó conviviendo en la cantina.
Aunque existe otra versión, de que hace aproximadamente 20 días atrás, el empleado de la gasolinera "La Esmeralda" junto con un amigo le propinó una golpiza a un sujeto conocido como "El Satanás" por el rumbo del campo de fútbol. Ahí la víctima juró vengarse de sus agresores.
Presuntamente cuando Alonso salía del "Congal" fue interceptado por dos individuos, quienes al parecer lo estaban esperando, para tomarlo por sorpresa y golpearlo.
De repente losa asesinos sacaron una navajas y un picahielos, asestándole más de 30 impactos en diversas partes del cuerpo, para luego correr con rumbo desconocido.
Todo parece indicar que el hoy occiso todavía permaneció con vida algunos minutos en el piso, pero como nadie lo auxilio murió desangrándose, en la oscuridad de la noche.
Fue a las seis de la mañana cuando los hermanos Alejandro y
Karina Tapia Robles se percataron que una persona estaba en el suelo en medio de un charco de sangre, reportando a la Cruz Roja, al arribar los paramédicos confirmaron que ya había fallecido.
Fue el fiscal de la agencia del MP Sur, licenciado Gerardo Bautista, el actuante Miguel Palacios y el perito en criminalística, Jorge Acevedo, quienes se presentaron al lugar para dar fe del cadáver y ordenar el levantamiento del mismo para la autopsia de ley.
09/03/09
Nota 69713