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Santos con el último suspiro.
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A+ A- Nunca otorgues una falta cerca de tu área en la que te expulsen y dejes desbalanceado a tu equipo en el último minuto. Sobre todo si eres defensa y el equipo contrario tiene a Daniel Ludueña sobre el terreno de juego, así debería dictar algún mandamiento del futbol mexicano o al menos ese será uno que seguirá de ahora en adelante Fernando Salazar.
Y es que el popular ´Pollo´ desajustó un partido hecho para el empate. La paridad de fuerzas era evidente y hasta justa, lo hizo con una plancha sobre Oribe Peralta. No sólo vio la tarjeta roja, dio una oportunidad de oro a la pierna derecha del ´Hachita´ y dejó coja a su gente que le extrañó en la última jugada del partido.
El argentino cobró el tiro libre, el esférico cruzó el limpio horizonte de Torreón, brincó a defensores y ofensores, cayó a la posición de Peralta, que pudo haber sido marcado por Salazar, y ´El Cepillo´ con un remate de cabeza marcó el tercer gol de su equipo.
Instantes después el árbitro pitó el final del encuentro. El tanto valió para el triunfo y, de paso, cortó una racha de
Rubén Omar Romano de 22 juegos consecutivos sin conseguir una victoria en la Liga.
Mucho antes, en el primer tiempo, Monarcas fue superior a los Guerreros. Fue algo más claro en su accionar desde el medio campo, Droguett y Elías Hernández ganaban la partida a Ludueña y ´Lorito´ Jiménez.
Tanto así que al descanso se fue Morelia con el marcador de un gol a cero a su favor. A los 30 minutos, luego de que Elías Hernández cobró un tiro de esquina,
Luis Gabriel Rey aprovechó las distracciones de la zaga local para anotar de cabeza sin siquiera brincar.
Un tanto atascado, la mejor chance del local también fue vía un tiro de esquina a los 19 minutos, Ludeña cobró y Figueroa ganó el balón por alto, pero después de muchas dificultades para controlar el esférico, Muñoz se quedó con él.
La entrada de Oribe Peralta en lugar de Rafael Figueroa, en la segunda mitad, le dio claridad y profundidad al frente a Santos, y un socio futbolístico a Ludueña.
Así a los 48 minutos, Walter Jiménez empató el juego con un servicio de Ludueña, pero Monarcas, que mostró una poderosa personalidad, puso su segundo gol a través de Hugo Droguett tras un pase de Elías Hernández, que dio un gran juego.
Pero Ludueña y Peralta estaban integrados, y entrelazados al partido como las nubes al cielo y entre más pasaban los minutos mejor se entendían.
Incluso a los 65 minutos, Santos anotó pero el árbitro anuló la anotación por un supuesto fuera de lugar que no existía, pero el segundo tanto de los de casa se paseaba en el ambiente.
A los 79´, el argentino inicio una jugada que continuó el ´Cepillo´ con un pase filtrado y Darwin Quintero anotó el empate.
El juego estaba parejo, la paridad cantada, el tiempo corrió y todo parecía justo para todos. Pero apareció Fernando Salazar, la tarjeta roja, Ludueña y Peralta. Y, entonces, el nuevo mandamiento del ´Pollo´...
17/01/10
Nota 77437