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| Ni la presencia de más de mil guardias evitó que las estrellas posaran para la foto.
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A+ A- Los Ángeles. Como era de esperarse, en la entrega del Oscar no podían faltar las manifestaciones en contra de la guerra y un grupo de aproximadamente 100 personas gritaron afuera del Teatro Kodak consignas de repudio por la acción militar que Estados Unidos emprendió en contra de Irak.
Los manifestantes eran de todas las edades y con pancartas y mantas dejaron sentir su desacuerdo con la guerra.
Otras más decidieron expresar su apoyo a los soldados estadounidenses que actualmente combaten en el Medio Oriente.
La gran mayoría coincidieron en señalar que la entrega del Oscar debió suspenderse.
"El Oscar no debió haberse realizado", dijo Mattew Green, residente de Los Ángeles, "más que nada porque nuestros soldados merecen respeto. Ellos están peleando por nosotros y eso no es justo".
Afuera del teatro se instaló un fuerte dispositivo de seguridad que incluyó a más de mil policías de los diferentes departamentos de California, así como el FBI.
Unas 10 cuadras fueron cerradas alrededor del teatro, lo que hizo imposible que los curiosos se acercaran al lugar.
Sólo las limosinas que traían a los artistas podían entrar por un lado del Bulevard Hollywood para llegar hasta la entrada principal del teatro.
El ambiente era tenso, ya que por primera vez el Oscar se realiza en tales condiciones.
Pasean por la alfombra
Aunque durante la semana se había dicho por parte de los miembros de la Academia que las celebridades que llegaran al Oscar lucirían un vestuario sobrio y que no se detendrían para ser fotografiados, sucedió lo contrario.
Estrellas como Nicole Kidman, Renée Zellweger, Julianne Moore, Halle Berry, Diane Lane, Sean Connery, Jennifer Garner, Kate Hudson y Nia Vardalos, entre otras, arribaron al lugar luciendo una gran sonrisa y posando para un grupo selecto de fotógrafos acreditados por los organizadores del evento.
Salma Hayek llegó a la ceremonia acompañada por sus padres, hermano y novio, Edward Norton.
La cadena ABC realizó, media hora antes de la gala, un programa especial para resaltar la llegada de las estrellas, así como entrevistarlos antes de que hicieran su entrada al Teatro Kodak.
Adentro, los invitados ocuparon sus asientos y, sin duda alguna, la plática entre ellos era de cómo iba la guerra.
Incluso, en el área de prensa, se transmitieron las imágenes de la cadena ABC que iban enterando minuto a minuto del conflicto bélico a los reporteros.
24/03/03
Nota 8272
