A+ A- Víctor Trujillo desea envejecer al mismo tiempo que "Brozo", ni antes ni después. La vida le ha enseñado a no idealizar nada, por eso el conductor quiere ponerle canas a la peluca verde, en unos cuantos años.
"Es una tentación ver envejecer a un payaso, porque la costumbre marca que ellos nunca crecen. Igual y "Brozo" utiliza lentes, no sé. Lo que puedo decir es que si ahora es intratable, de viejo puede ser peor."
Sentado en la comodidad de su escritorio, de Televisa Chapultepec, Trujillo recibió a los medios para platicar de él, de su familia y de su historia personal.
"Por ejemplo, sé que si me aplico con mis hijas, existe la posibilidad de que tenga una buena vejez y lo mismo como trabajador."
La familia de Víctor está integrada por su esposa Carolina y sus dos hijas: Carolina y Paulina, quienes tienen muy claro quién es y a qué se dedica su papá.
"Yo sabía que en su escuela no iba a haber más de dos opciones, o les decían: Tú eres hija de tal... o ¿A poco tu papá es actor? Porque nadie lo conoce. Ah, pero cuando les dicen que son hijas de `Brozo`, ellas aclaran: No, mi papá es Víctor Trujillo, quien caracteriza a un payaso en la televisión."
Víctor estudió en el Colegio Alemán. Desde muy chavo entró en el medio, a los 14 años ya estaba en una estación de radio. A los 16 se fue de aventura a Europa.
"Aprendí inglés y alemán, entonces me alquilaba con mi guitarra para cantar en fiestas."
Cuando regresó a México quiso seguir con su carrera de teatro, pero los compromisos aumentaban, pues tenía giras y cabaret, porque sabía que se empezaba a enamorar y necesitaba guardar dinero.
Para él, sus gurús fueron: Héctor Ortega, Jesús Galves y Claudio Brook, quien además de experiencia profesional, le enseñó la sencillez para enfrentar la vida.
"A él no le gustaba que comiéramos pollo o sandwiches; nos llevaba a buenos restaurantes y pedía pescado, vino tinto. Sin embargo, a los de la producción nos ponían a temblar, porque no sabíamos si el dinero nos alcanzaría."
Dice que "quizá no de la misma forma", pero él representa a un maestro para sus colaboradores.
"Lo que intento es ser un buen ejemplo y tener un magnífico ambiente laboral; cuando veo que lo estamos logrando me emociono mucho."
Para Víctor, "el único trabajo que vale la pena es el que te divierte; el que te entretiene a ti antes que a cualquier otra persona".
El conductor manifestó que antes de ser "Brozo", el personaje de televisión, papá, esposo y amigo, es ser humano, por eso hay ocasiones en las que necesita llorar.
"Ahora lo hago hasta con películas de Bambi, pero sobre todo me hace llorar la impotencia, lo inesperado, la ira o la melancolía."
Dijo que le hubiera gustado cubrir la parte irónica de la guerra.
Ahora, espera que la empresa le dé luz verde para salir al aire con su programa Viernes que te quiero viernes.
21/04/03
Nota 9094